Reserva un rinconcito para un poquito de verde natural. Unos cactus, unas hierbas aromáticas... a mí se me dan fatal pero siempre lo intento.

Mantén contentos a los más pequeños personalizando sus objetos sin renunciar a la estética del espacio.

Personaliza hasta lo más funcional. Este estor que podría resultar anodino, pasa a ser un elemento imprescindible al camuflarse con la pared.

Delimita la zona del office con una alfombra apta para cocinas. Son fáciles de limpiar y son muy agradables para esos a los que les gusta ir descalzos por la vida.

Entre las diez cosas que odio del mundo mundial, y en el Top One, está la botella de Fairy a la vista. No sé, pagarán por hacerle publicidad? Con la de cacharritos monos que hay para el jabón.

Si eres de l@s que dejan la jarra del agua, el cacito de la leche o la cesta del pan a mano, procura que al menos sean monísimos.

Idem con el salero y los utensilios de cocina.

Y con todo lo que ronda por encima de la encimera.

Por favor, si pones flores, que peguen con el entorno. Como os podréis imaginar, unas rosas rojas, no pegarían ni con cola, de los celofanes coloridos de las floristerías, ya ni digo nada.

Nada de envoltorios en la comida que quede a la vista.

Unifica todo lo que quieras tener visible en una bandeja para poder limpiar la encimera con más facilidad.

No dejes morir las flores en un jarrón. Cámbiales el agua y tira las que se pongan feas. Lo mismo con la fruta, consúmelas antes de que se estropéen. El resultado será más fresco y cuidado.

En el número dos de las cosas que odio, son las vajillas feas. La vida es muy corta para beber en vasos de Nocilla.

No arruines el look final con ese reloj que encontraste en el chino. Espera para tener el que realmente te gusta. Norma aplicable a todo lo anterior.

Lámpara, si la vas a renovar, olvida poner un fluorescente con luz de supermercado. Una luz cálida es más agradable y relajante para las cenas en familia. Esta de fibras naturales trenzadas a mano proyecta un dibujo muy especial en todas las paredes.

Un lacado de puertas a manos de profesionales puede ser uno de los elementos clave en una reforma. Asegúrate de que los tiradores estén perfectamente limpios y presenten un buen estado.